28 ene 2011

Miradas

Acostumbrado a un mundo frío, donde nadie quiere saber nada que no sea para su propio beneficio, existen momentos y lugares que pasan a ser mágicos cuando estás en ellos. Con ello, he aprendido a valorar cada segundo de mi vida, y todo por una mirada.

Si el frío y la tensión existían en esos momentos, no los sentía. Era la eterna espera la que me ponía nervioso, pero era su mirada la que me confundía. Olvidé a que había ido a ese sitio bajo su atenta mirada. Era seria, dura, seca, pero a la vez cálida, intensa y, por que no decirlo, evasora del espacio-tiempo. Mi mente se llenó de preguntas que ni sabía como habían aparecido, y cuyas respuestas habían pasado de inexistentes a necesarias. La sensación de observar y ser observado por una persona que observa y es observada. ¿Realmente esa era su intención? ¿A que se debía? ¿Me conocía, acaso?

Esa mirada dejó en un segundo plano el fracaso de mi objetivo principal, y esa mirada no me abandonó en ningún momento ese día. Y, como no, al tenderme en la cama, sentí ese frío físico de La Laguna penetrando en mi piel, y esa tensión de la espera de un ente "superior", hasta que empecé a conectar con esa persona.

Unas personas me dicen que estoy loco por saber de ella, que solo fue una coincidencia, y que me olvide de todo eso. Otros me animan a que la busque, que valdrá la pena y que, cuando la encuentre, obtendré una recompensa. Sinceramente, no se que pensar. Si fue una mirada intencionada, quedaré como un luchador constante; si no, quedaré como poco mas que un pervertido. Pero hasta que no encuentre a esa persona, no tendré respuesta alguna, y eso me anima y desanima al mismo tiempo. Tiempo es lo que necesito para saber.

Steven Christiansen.


P.D: 20.000 letras de viaje sobre el ritmo - Bochen

19 ene 2011

White Lines

Deja la mente en blanco mientras lees estas líneas. Ahora mismo, cada sílaba es mas importante que la cotidianía que te rodea. Crea a tu alrededor una capa que te haga impermeable de problemas supérfluos, y sumérgete en tu propia conciencia.

Imagina el paisaje mas bello que recuerdes, hayas o no estado en él. Imagínate en medio, sintiendo en tu piel como te envuelve su característico aroma al tiempo que a tu mente acude una melodía con concordancia. Estás solo, tu solo, y sientes la felicidad activando cada una de tus células. Ahora observa el paraje bajo tus propios ojos, siente como el corazón golpea repetidamente en tu pecho de paz. Mueves tus manos, incrédulo, y comienzas a andar. Sonríes, porque ahora mismo no hay nada que pueda hacer que pierdas esa felicidad nirvánica, y solo puedes sentir relax y confort. Tu lengua, jugetona, se mueve en el paladar, intentando saborear este momento único, personal e intransferible. Levantas la mirada, y poco a poco notas como esa onírica imagen que te envuelve se va diluyendo en tu mente, hasta que no queda nada.

Agita un poco la cabeza y date tiempo para pensar que es lo que realmente importa en tu vida.

Steven Christiansen

16 ene 2011

¿Que es el odio?

A menudo me hago esa pregunta. Quizás motivado por el saber, o por el morbo, acostumbro a observar a las demas personas en sus problemas cotidianos, y a las características únicas que tienen cada uno de ellos. Y he de decir, sin miedo a equivocarme, que el odio resulta poderosamente entretenido.

En un papel de personaje fuera de plano, en medio de una escena, uno puede entender hasta cierto punto, como es otra persona. Y el odio acostumbra a ser un factor calve para descubrir las motivaciones y los temores de cualquiera de nosotros. Porque todos tenemos miedo. Ya sean irracionales, infundados o exacerbados, siempre habrá algo que os haga temer, que nos haga dudar y, en consecuencia, que nos altere, nos crispe y nos haga actuar de forma diferente.

Pondré un ejemplo bastante común en estos días. Un joven, llamémosle Pedro, tiene una vida completamente normal, tiene amigos, colegas, familia, una novia (o ex, a su gusto) y un pequeño hamster en su cuarto. Un dia cualquiera, le llega el rumor de que alguien está descalificándole, sin aparente motivo. Pedro, que es bueno de carácter, se extraña, pero al principio no son mas que rumores. Además, ¿quién querría hacerle daño, cuando él es el primero en tender una mano de ayuda y escuchar los problemas de los demás?

Pongamos que los rumores no cesan, sino que incrementan, tanto en número como en dureza. Pedro, que no le gusta ser el nombre en la boca de los demás, comienza a encontrar a los iniciadores de los rumores. Para su sorpresa, gente que en un pasado no muy lejano había ayudado de una forma u otra, ahora ve incrédulo como la gratitud de dichas personas es opuesta a la esperada. ¿Que hace Pedro? Montar en cólera. Palabras que no se asemejan a la realidad, vertidas por gente cercana y a la que le tienes aprecio, únicamente usadas para comprometer la reputación de él mismo obligan a pagar con la misma moneda a los que les acusaron primero. ¿Los métodos? Exactamente iguales, con la misma credibilidad en los comentarios, y con la misma intención de hacer daño a la imagen de los demás. Incluso, si el tema se alarga y no acaba, Pedro puede acabar llegando a las manos con los que antes eran sus allegados.

Sin entrar a valorar el fin y los medios, creo que el mensaje es bastante claro. El miedo motiva a defendernos, y cuando no podemos (o no sabemos) como hacerlo, recurrimos al odio. A su vez, el odio nos nubla, haciendo que actuémos de una forma diferente, lo creo que crea mas odio en nosotros. No somos tan variables como puede parecer, y si actuamos de forma diferente nos sentimos mal por no ser nosotros mismos.

Pero hasta ahora he hablado de que precede y motiva el odio pero, ¿es el odio negativo?

El rencor nos ayuda a recordar lecciones pasadas, y la ira expulsa todo el malestar que hay en nosotros. Como todo en esta vida, nada es exacto. Es relativo que el odio sea malo. El odio nos hace actuar de una forma que no es la nuestra, y que con seguridad aborrecemos. Pero nos hace estar alerta, y nos facilita una visión diferente. El odio en sí no es malo, dejarse llevar por él si lo és, sobretodo cuando desemboca en odio ilógico o en venganza. Una persona que vive con odio no puede vivir bien, o eso dicen, mas no lo veo así. El amor, si es mucho, puede ser mas problemático que el odio. El odio no es mas que otra forma de que nuestro cerebro se defienda del entorno.

Sin odio, no seríamos mas que gente ingenua sin capacidad de reacción, ¿no creen?

Steven Christiansen

4 ene 2011

Outro

No se como empezar estas primeras líneas, no porque no sepa que decir, sino porque no se como dosificarlo.

Esto es solo una introducción a un espacio donde nada esta escrito. Deja fluir tu mente entre las palabras que escribo, relájate y sonríe. ¿De que va este blog? Quien sabe, no he analizado aún mi mente. Únicamente dejaré correr mis dedos sobre el teclado, y expresaré mis opiniones. No seré ni políticamente correcto ni trataré con atrocidad temas. Al igual que los músicos fluyen por la música, quiero que ustedes sientan lo mismo que siento cuando me pongo delante de esta pantalla, cuando siguen con parsimonia las letras y crean su propia opinión a partir de una.

Ni tecnócrata, ni antisistema, ni anarcosindicalista ni rebelde sin causa. No soy rebelde. Sencillamente quiero expresar mi dis-conformidad con el mundo que me rodea, con las personas que lo ocupan y con las acciones y sentimientos que los hacen únicos.

Este blog se trata de una lucha mental entre ellos, tu y yo. Nadie tiene la misma opinión que otro, y exponga la mía o la de Chano, no pensarás igual al completo. Yo solo ofrezco poner en marcha tu mente, de ti depende el resto. Un Saludo.

Steven Christiansen